22 marzo, Día mundial del agua: el agua y la energía, cuestiones de futuro íntimamente relacionadas.
Quebec, 20 de marzo de 2014 – El día mundial del agua tiene por tema este año: “El agua y la energía!”. Para un gran número de personas en el mundo, el evento tendrá gusto amargo, ya que frente al desarrollo desenfrenado del sector energético, sobre todo de los hidrocarburos no convencionales, la salvaguarda del agua es una cuestión crucial. En este contexto, los Amigxs de la tierra de Quebec (ATQ) y el Comité por los derechos humanos en América latina (CDHAL), se asocian para denunciar la utilización de los recursos naturales, sin la real perspectiva de un modelo energético justo y igualitario en todas las Américas.
Tanto en Quebec, Canadá como en América latina, el descontento crece frente al modelo energético y la agitación social, ligada a los impactos del sector de la energía sobre el AGUA, es cada vez más frecuente. Varios movimientos y organizaciones pelean contra proyectos como la explotación y el transporte de las arenas bituminosas, la exploración y la explotación del gas de esquisto (Quebec, Estados Unidos, México), la del Presal en Brasil, al igual que controvertidos proyectos hidroeléctricos en Honduras, Colombia, Brasil o México.
La explotación de energías sucias contamina los recursos hídricos
La lista de daños que afectan al agua sería demasiado larga para compilarla, pero efectivamante aquí y en otros lugares las poblaciones sienten los impactos. Citemos, por ejemplo, las fugas de grandes estanques de residuos de las arenas bituminosas que contienen productos químicos tóxicos y se filtran al río Athabasca y las aguas subterráneas (fugas del orden de 6,5 millones de litros al día por un solo estanque de sedimentación de lodos, periódico Environmental Science and Technology, enero 2014). Millares de litros de agua contaminadas por la fracturación hidraúlica contienen sustancias peligrosas para la vida marina y la salud humana.
Las energías llamadas «verdes» contaminan los recursos hídricos.
En el caso de las energías dichas «verdes», como la hidroeléctrica, una acumulación de la sustancia neurotóxica mitelmercurio en el agua de los ríos se crea donde se encuentran los tanques.
Un cambio se impone: reducir nuestro consumo energético
No se trata solamente de reducir nuestro consumo de hidrocarburos fósiles, el cual tiene graves impactos sobre el clima, sino también nuestro consumo energético. Para esto, tenemos que cambiar tanto nuestro modelo energético como nuestro modelo de desarrollo, basado en el extractivismo. Es verdaderamente el momento de poner en marcha un modelo energético justo, igualitario, innovador, sobre todo a través de un sistema energético descentralizado que consiste en valorizar los recursos energéticos limpios en cada territorio.
Sobre Amigxs de la tierra de Quebec
Los Amigxs de la Tierra de Quebec forman un movimiento ciudadano facilitando la transición hacia una sociedad ecologista. Es a través de la defensa colectiva de los derechos y de la educación popular autónoma que se consigue esta misión. Con 1200 miembros, el organismo forma parte de una red sostenida por la base y presente en 77 países.
Sobre el Comité por los derechos humanos en América latina
El Comité por los derechos humanos en América latina (CDHAL) es una organización apartidista, sin fin lucrativo, que trabaja para la promoción de los derechos humanos en América latina. Además, CDHAL trabaja para dar más visibilidad a los impactos socioambientales de los proyectos extractivos apoyando a los grupos de base de América latina, especialmente a través del proyecto «Energía para que y para qué? Un análisis crítico de nuestro modelo energético».
ATQ: Sandrine Louchart, eau@atquebec, 418-524-2744
CHDAL: Aida Mas y Nadja Palomo, education@cdhal.org, 514-257-8710 ext.539
A ver: http://www.atquebec.org/